Con la carroza que representó a la ciudad en la edición131 del Desfile de las Rosas, la comunidad plasmó una leyenda japonesa de ilusión y armonía.
A marchas forzadas se observó al staff de la Downey Rose Float Association (DRFA) y los cientos de voluntarios que durante cuatro días, del 26 al 30 de diciembre, decoraron el carro alegórico que personificó a la ciudad el primero de enero en Pasadena, en el desfile cuyo tema este año fue;“El Poder de la Esperanza”.
Fueron jornadas de trabajo de 12 horas, de 10:00 de la mañana a 10:00 de la noche,que se amplió a 24 horas el último día,para cumplir con la meta de terminar el decorado en tiempo y forma.
“Pude participar haciendo origami (grullas), decorando la carroza e incluso compré una pulsera para ayudarles a la recolección de fondos”, nos platicó Kamila Cafi, una chica voluntaria quien se encuentra de vacaciones por la ciudad.
Fue así que el 31 se cumplió con el tiempo estimado, día en el que muy temprano por la mañana los jueces del desfile pasaron a calificar el carro flotador, que a la postre le significó obtener el galardón “Trofeo Fundadores” (Carroza más destacada decorada por voluntarios de una comunidad).
Según cifras de Reggie Donahue, vicepresidenta de la directiva de DRFA, un promedio de casi 200 personas trabajaron durante la “Semana Deco” diariamente, y agregó: “Mi labor es coordinar el comedor; todo lo relacionado a facilitar los alimentos para los voluntarios, al mediodía y la tarde, para que nadie se quede sin comer”.
Finalmente a las 18:00 horas del último día del 2019, la carroza salió del “Rose Float Barn”, en el área sur de Rancho Los Amigos, escoltada por patrulleros de Downey y de la oficina del alguacil, hacia su formación en Pasadena junto con otras 39 carrozas.
Diseño Japonés
La DRFA y los creadores de la carroza decidieron participar bajo el nombre de “On The Wings of Hope”, cuya temática representa a un tradicional jardín japonés con su puente, rocas, lagos, cascada,bambúes, cerezos, semillas, más de 20 mil flores naturales y linternas de piedra, una del tipo Yukimi (con “patitas”) y otra de tipo Ikekomi (“enterrada”).
Así mismo, grullas gigantes que asemejaban a unas de origamiy otro par a unas reales.
Coronando la carroza se observaba una campana japonesa de la paz, réplica de la situada afuera del edificio de las Naciones Unidas.
Las personalidades que este año desfilaron sobre la carroza fueron: La Señorita Downey, Viany Campa y su Corte; el doctor Jaime Díaz, director médico del PIH; Alfonso Estrada, un legendario paciente del PIH y residente de la ciudad, así como la joven Eileen Garrido, quien tiene un serio padecimiento cardiaco y creó la fundación “Corazones Latiendo”.
El equipo que llevó al cabo el trabajo duro y la ingeniería del carro alegórico, lo componen siete personas de entre las cuales un par, trabajaron para Knott´s Berry Farm.
Un mensaje de esperanza y paz
Una ancestral leyenda japonesa, dicta que si haces un mil grullas de papel, se te concederá un deseo, y si las regalas a una persona, le estas obsequiando esperanza, salud y felicidad.
La pequeña Sadako Sasaki, vivía en Hiroshima cuando el ejército norteamericano dejó caer la segunda bomba atómica sobre la ciudad.
Diez años después a la niña le diagnosticaron leucemia, y estando en el hospital, una amiga que la visitaba le contó la leyenda, al tiempo que le enseñó a doblar grullas.
Sadako decidió doblar las mil, deseando recuperar su salud y la de todos los niños que padecieron la guerra.
La niña sólo dobló 644 para cuando murió en la cama del hospital, pero sus compañeros de escuela doblaron las 356 faltantes para que el deseo de Sadako se cumpliera, y gracias a ella, las mil grullas de papel son actualmente un símbolo de paz internacional.
“Decidimos ir más allá y doblamos arriba de 10 mil grullas, para repartirlasen diferentes lugares de Downey. El Hospital Rancho Los Amigos tiene dos mil, PIH tiene mil, y así en el Museo Espacial, el Ayuntamiento, la estación de Policía…” nos platica Carrie Lynn Redfox.
Ella fue creadora de la imagen para la carroza. “Me quedo con que le enseñamos a la gente a doblar cientos de grullas, las regalamospara llevar esperanza y sanación a los lugares que te comenté, pero sobre todo, que unimos a la comunidad con este tema”, finalizó.